Publicado el viernes 2 de agosto de 2013 en página    3

La Peatonal Sarmiento: Su historia

En una nota publicada en La Voz del Pueblo el 15 de octubre, firmada por Ricardo Pinat, señalaba que “el martes 11 de octubre de 1994, el Concejo Municipal de Casilda sancionaba con el Dictamen Nro. 632, que la calle Sarmiento entre Buenos Aires y Lisandro de la Torre de la mano impar se convertiría en Peatonal. El Intendente era Eduardo Rosconi.
Ya ese entonces el Colegio de Arquitectos de Casilda, advirtió a la Secretaría de Planeamiento que el ímpetu que se el quería brindar a la comunidad sobre esa arteria podría resultar negativo en cuanto a la población y fundamentalmente al tránsito”… También advertía el problema del desagüe, del estacionamiento y de las cargas y descargas que los comercios situados allí, que debían realizar.

Pinat, realiza otra nota señalando los posibles problemas para que la calle Sarmiento se convierta en Peatonal. La nota publicada el 29 de octubre, planteaba dentro de sus puntos más importantes que “la obra beneficiaría a unos pocos en desmedro de la mayoría. Que había que respetar el trazado de las plazas como estaba ideado por el fundador Carlos Casado que a las mismas se las podía recorrer en auto en sentido horario y anti horario. Que no respetaba la ecología al reducir espacios verdes y también proponía antes de llevar a cabo la obra realizar un cierre transitorio a modo de prueba los días viernes, sábados y domingos, para favorecer a la juventud para que allí se reúna”.
El 5 de noviembre, se publicaba en la tapa de La Voz, donde se informaban los comienzos de los trabajos de colocar los baldosones en la calle Sarmiento para que se convierta en peatonal. La primera etapa de la obra estaría terminada para la navidad de ese año y concluida en Marzo de 1995, según lo confirmaba el Arq. Norberto Villa de la Secretaría de Planeamiento.
Según un estudio que había encargado el Arq. Cattoni, el tránsito debía seguir el sentido de la calle Sarmiento (a la inversa de la actual). También los profesionales municipales señalaron que el pavimento no se iba a tocar por si había que modificar en el futuro.

El 19 de Noviembre, el Colegio de Arquitectos toma conocimiento del mencionado estudio por La Voz y le envía una nota al Presidente del Concejo, Carlos Muia, para solicitar una copia del mismo, ya que para esa institución el mini proyecto puesto a prueba por el municipio no era suficiente para realizar la obra de la Peatonal. La nota fue firmada por su secretaria María Virgina Pozzi y su Presidente Alicia Farina.
En una entrevista exclusiva concretada el 26 de noviembre por La Voz al Secretario de  Planeamiento Municipal Raúl Pietronave, señalaba que “quizás dentro de 15 años se necesite recuperar la calle, por eso resolvimos no tocar nada de lo original y de esta forma no se agravia el pavimento”.
También aclara que el proyecto total era de realizar 2 cuadras y media de peatonal que abarcaría por calle Sarmiento y Falucho hasta Dante Alighieri. El vecino se hacía cargo de la parte de su frente y el resto es una partida aprobada por el Concejo que es de $ 70.000 (en ese entonces dólares) que aporta el Municipio.
En la nota el funcionario menciona que el proyecto era de integrar la Galería Casilda a la Terminal de Ómnibus.
Este último proyecto al igual que la realización de las 2 cuadras y medias no se llevaron a cabo.
El 3 de marzo de 1995 se publicaban los avances de las obras en la peatonal. Ya estaban colocadas las palmeras. La peatonal no tuvo una inauguración oficial, pero se finalizó a mediados de abril de1995.
Poco tiempo demoró en ser “adoptada” por los Casildenses. Su estética es muy atractiva y fue siempre punto de reunión, especialmente de la juventud.
En el momento de mayor apogeo, llegaron haber 5 bares en esa cuadra. Los fines de semana de verano era difícil encontrar un lugar para sentarse.
Con el tiempo, las baldosas se fueron deteriorando. Los bares por distintos motivos fueron desapareciendo.
El viejo Hotel España que ocupa más 50 mts. está en desuso. En su interior hay partes realmente muy comprometidas y la exterior no condice con la estética de la peatonal. El bien es de un particular, pero la Municipalidad puede sugerir a sus propietarios que no radican en Casilda a mantenerlo en condiciones.
En la actualidad queda un solo bar que trabaja sólo los fines de semana. El sentido de la calle se volvió a girar y de ese lado se colocó el estacionamiento medido.
En cuanto a los comercios, están los tradicionales, la famosa florería, la pilchería y algunos relativamente nuevos.
A 18 años de su construcción, días pasado el Concejo Municipal votó por refuncionalizarla.
El proyecto es del concejal Germán Zarantonello quien expresa la necesidad de “embellecer y refuncionalizar la peatonal para que los conductores puedan transitar en el horario de 8 a 20 hs.
En el proyecto está la solicitud de colocar adoquines (símil a como está en la calle Laprida de Rosario frente al teatro el Círculo) y luego de las 20 cerrar con cadenas al tránsito para que sea utilizada como peatonal. Tuvo 4 votos a favor dentro del concejo los de Pablo Zanetti, Mauricio Planchich, Antonia Pierucci y el propio Germán Zarantonello. En tanto los concejales Pablo Tomat, Robarto Meli y Pedro Sanitá votaron en contra.
Ahora el proyecto está en el Ejecutivo, donde el Intendente Juan Carlos Bacalini debe resolver si lo veta o no.
Al cierre de esta edición el Intendente nos adelantó que NO VETARÍA el proyecto asegurando que “es hora que cada uno se haga responsable de sus actos, ya que con el valor de una cuadra de adoquines se pueden realizar unas 10 cuadras de mejorado”.
Vemos con muy buen tino la propuesta de Zarantonello de refuncionalizarla, que sería retomar en parte la idea que explayaba en nuestras páginas Ricardo Pinat. Así da mucha pena verla y muchos de los comerciantes también la tildan de antihigiénica.
Sería muy importante no repetir errores y consultar al Colegio de Arquitectos e Ingenieros para no hacer marchas y contramarchas y de esta manera evitar gastar recursos del municipio.
Y como cerraría el recordado Pinat, “y a usted qué le parece?”.
 Javier Cortés